EDLS #12: Christian Jacq

Hola Amantes de la lectura! 

Esta semana quiero dedicar la sección a un egiptólogo y escritor francés que se halla dentro de mis favoritos. La verdad lo hallé por casualidad, me encontraba trabajando en una tienda y resultó que una chica, compañera de trabajo, aficionada y entusiasta de la lectura al igual que yo, me prestó su tomo, que contenía al completo la trilogía El Juez de Egipto. 

Yo le había comentado que era muy aficionada al Egipto antiguo y de hecho, de niña había soñado en convertirme en egiptóloga, pero eso era realmente una tontería porque en mí país no existe ni siquiera la especialidad en arqueología, hecho muy lamentable puesto que de alguna forma ese aparente desinterés por el estudio y el desarrollo de nuestra civilización, no has llevado incluso a desestimar la importancia suprema de nuestra historia y nuestra cultura, e incluso, lo que para una sociedad como la francesa por ejemplo, que con sumo cuidado y respeto son capaces hasta de restaurar una edificación con 50 años por lo menos de antigüedad, no así ocurra con mi amado país, en el que se han derribado y vuelto a construir centros comerciales, por encima de edificios que pertenecieron en algún momento a próceres o personajes de vital importancia para nuestra historia, porque lamentable también es que al parecer nuestro pueblo y nuestras autoridades no tienen ni sentido de pertenencia ni del valor histórico que como nación deberíamos poder ofrecer al mundo.

Pero bueno, ya me he ido por las ramas, supongo que esto es un tema demasiado sensible para mí y mi opinión es bien particular, así que vamos a por la vida de Christian Jacq.

Biografía:

Chistian Jacq nació en París, en 1947. 

Egiptólogo renombrado, se apasionó por la civilización egipcia al leer, a los trece años, Historia de la Civilización del Antiguo Egipto, de Jacques Pirenne. 

Doctor en Egiptología en la Sorbona, Chistian Jacq disfruta de una sólida reputación académica. Ha escrito numerosos artículos sobre egiptología y consiguió el éxito literario con su primera novela "El ilustre Champollion". 

Preocupado por la supervivencia de la civilización egipcia, fundó, junto con su esposa, el Instituto Ramsés, dedicado a reconstruir, fotográficamente, los emplazamientos arqueológicos actualmente amenazados en Egipto, con el fin de preservarlos. En 1995 lanzó la Serie Ramsés, en cinco volúmenes, que consagró definitivamente su carrera literaria. Publicada en 25 países, ésta serie ha vendido ya más de 5 millones de ejemplares.

Algunos datos curiosos:

• El interés de Christian Jacq por la egiptología comenzó cuando tenía trece años y leyó la “Historia de la Civilización Egipcia Antigua” de Jacques Pirenne. Con sólo 17 años hizo su primer viaje a Egipto, la tierra de los faraones. Sin embargo, como él mismo lo explica, no sólo leyó literatura clásica, griega, latina y francesa, sino que admite haberse adentrado en los misterios de las pirámides a través de la lectura de las aventuras de Blake y Mortimer, una serie cómica en las que encontraba imágines mucho más divertidas que las lápidas del viejo profesor Pirenne, así como de los álbumes de Tintín. Pero no sólo gastaba sus ahorros en éste tipo de lecturas, sino que también le gustaba Stendhal, Musset, Nerval. 

• Hijo de un farmacéutico, debió convertirse contra todo pronóstico en ingeniero o biólogo, pero sus intereses particulares lo llevaron por otro lado de la ciencia. 

• Empezó a estudiar la carrera de filosofía, pero su pasión por Egipto le llevó a centrarse en la arqueología y egiptología, doctorándose en ésta disciplina en la Universidad de la Sorbona. 

• Doctorado en Egiptología en La Sorbona e iniciado en la Masonería, es un gran experto en la época del faraón Ramsés II, y fundó el instituto que lleva el nombre de dicho gobernante egipcio. 

• Su abuela definitivamente fue una gran influencia para él, fue ella quien lo adentró en el hábito de la lectura y fomentó de alguna manera todos sus sueños. De hecho, en sus historias los animales cobran gran significado, como lo son en su vida cotidiana, y todo ello se lo debe a ésta mujer, un tanto excéntrica, que era su abuela, de quien comenta, albergaba en su casa toda clase de animales, como gatos, hámsteres y quince acuarios gigantes con peces exóticos. 

• Considera a la civilización egipcia la más avanzada en términos como: “tuve la oportunidad de estudiar otras, los sumerios, babilonios, asirios, civilizaciones griega y romana y los chinos. Pero si hacemos un balance en términos de valores espirituales, la armonía de la sociedad, el papel de la mujer, una cierta alegría de vivir, podemos decir que los egipcios han hecho algo grande”. 

• Lo interesante de sus novelas es la mezcla entre ficción e historia real, que atraen tanto a lectores que buscan conocimientos académicos como aquellos que desean disfrutar de una aventura literaria. 

• Jacq ha utilizado distintos nombres a lo largo de su carrera, siendo J. B. Livngstone, Christopher Carter y Celestine Valois, los más conocidos. 

• Aún bajo pseudónimo, a menudo Egipto era el tema central de sus libros. 

• Declarado admirador de Ramsés II y gran experto en la época de éste faraón, Christian Jacq fundó, junto a su esposa, el Instituto Ramsés, que se dedica a la creación de una descripción fotográfica de Egipto para la preservación de sitios arqueológicos en peligro de extinción. Actualmente cuenta con la mayor colección de fotografías sobre la antigüedad egipcia, unas quince mil placas, pero tiene el proyecto de reunir más de cien mil. 

• Tiene en su haber varios premios, como el que recibió por su obra académica “El Egipto de los faraones”, que fue galardonada con el premio de la academia francesa. Otras obras suyas han merecido el Jean d’Heurs de novela histórica y el Prix des Maisons de la Presse por “En busca de Tutankamon”. 

• Actualmente Christian Jacq reside en Ginebra (Suiza). 

Sin duda, siempre recomiendo leer a éste autor, no sólo por el aspecto histórico y académico que muestra en sus obras, porque como él mismo ha manifestado, aunque no se considere un egiptólogo de excavación, sino un estudioso comprometido, el proceso de investigación, sumado a los conocimientos adquiridos a lo largo del tiempo, resultan de vital importancia a la hora de escribir sus obras, porque teme cometer errores e imprecisiones, y precisamente porque alguna vez lo ha hecho, es por lo que se ha vuelto más severo consigo mismo en ese aspecto; pero también hallaremos en sus obras mucho misterio, suspenso y grandes tramas y conflictos políticos, además de con un toque de romance, así que los invito a que no se lo pierdan.