Hola Amantes de la lectura.
Hoy además de compartir con ustedes la historia de otro grande escritor, quería dejarles una nota un tanto lamentable para mí. Sé que no es algo que sea de su interés, sin embargo, la sucedido me tiene tan cabisbaja que, siento que si al menos lo comparto, de alguna manera pasará más rápido el trago amargo.
En pocos meses he sido victima en dos ocasiones, del robo de mi móvil, ayer me encontraba en un local de comida y lamentablemente un antisocial me abordó, tomando mi móvil, que se hallaba en el bolsillo trasero de mis jeans. Por supuesto la situación fue tan bizarra, porque aunque se encontraban al menos dos clientes más en el establecimiento, nadie hizo nada por ayudarme, así que sí, paso a engrosar nuevamente las filas de víctimas del hampa súper organizado que tiene tomado a nuestro país, y a tan sólo unas calles de la comandancia policial, por lo que estaré un tiempo más que incomunicada, porque en los actuales momentos y con la crisis económica y social que nos envuelve, veo harto difícil poder adquirir un nuevo aparato, al menos con las misma características del que poseía.
Debido a que ayer me encontraba resolviendo algunos asuntos personales no pude publicar en el blog y con lo sucedido pues mis ánimos han ido en picada. Pero como uno no debe permitir que los demás le roben la esperanza y la positividad, resulta para mí esencial continuar con éste espacio al que le he dedicado mucho de mi tiempo y que aunque pequeño, resulta una especie de paliativo ante el día a día. Pues a pesar de las realidades sociales que nos atraviesan y de las que en muchos casos hemos sido víctimas, sé que existen personas que pasan por circunstancias mucho más difíciles, desgarradoras incluso, que siguen adelante a pesar de ello, e incluso se fortalecen y se llenan de más ánimo para continuar, por lo que es importante mantener el ánimo, la fe y esperanza ante todo.
Pero veamos. Hoy les traigo a un autor bien reconocido, de cuya obra maestra ya les comentaba en otro espacio, no he podido leer. No sé si tenga que ver con el estilo del autor, porque Capote es sumamente minucioso en sus descripciones, lo cual es de agradecer, pero durante su lectura me sentí algo agobiada. Sin embargo, no deja de ser una figura realmente importante no sólo en la literatura, sino para el arte en general, un personaje atrayente, como controversial.
Biografía:
Truman Streckfus Persons. (Nueva Orleans, EE UU, 1924-Los Ángeles, 1984). Novelista estadounidense. Pese al carácter profundamente realista de su obra, combinó en sus narraciones el misterio y el refinamiento literario, poniendo de manifiesto las oscuras profundidades psicológicas del sistema norteamericano a través de caracteres inquietantes, como en el caso de A sangre fría (1966), la más famosa de sus novelas.
A los cuatro años sus padres se divorciaron y durante el resto de su niñez vivió la peripecia y la soledad del típico producto de "hogares separados" (inestabilidad o bonanza, traslados entre uno y otro progenitor), todo ello con el horizonte imperturbable de las granjas del Sur profundo y rural. Su madre se volvió a casar con un próspero hombre de negocios apellidado Capote, nombre que adoptó Truman casi de inmediato.
Escritor precoz, desde muy adolescente había comenzado a pergeñar historias para, como él mismo diría, paliar la soledad de su infancia. A los dieciocho años entra a trabajar en el New Yorker y a los veintiuno deja el periódico y publica un relato, Miriam, en la revista Mademoiselle, que atrae la atención de los críticos y es seleccionado para el volumen de cuentos del premio O'Henry de 1946.
Después del galardón y tras haber conseguido que se hablara de su estilo "gótico e introspectivo" y de la influencia de Poe en sus cuentos, Truman Capote escribe, durante dos años, Otras voces, otros ámbitos (1948). Esta novela impresionó más por su abierto planteamiento de las relaciones homosexuales que por sus verdaderos méritos literarios, y por sus reflejos autobiográficos más que por su delicada exposición de las vivencias infantiles: un niño solo, Joel, que busca a su padre en el profundo Sur y termina por elegir a un transvestido como figura paternal. En esta su primera novela, Capote fue comparado con Alain-Fournier, el autor de El gran Meaulnes, por su peculiar objetivación poética del mundo de la infancia, por su atmósfera lírica y por su exaltación de la naturaleza.