Reseña En Tiempos de Guerra

Hola Amantes de la Lectura!

De vuelta nuevamente con una nueva reseña, que como ya les mencioné en la entrada anterior, ya tenía al igual que otras, preparada con anticipación, porque éste libro me lo devoré apenas en pocos días luego de su publicación, que fue en el mes de Noviembre, así que nada, aquí les dejo transcrita el original de dicha reseña.

Espero les guste porque de verdad es una de las más especiales para mí al menos, de las que he realizado en el año.

1946, Chicago, tras el fin de la Segunda Guerra Mundial. 

Matthew Perlman, un joven de 28 años, emprende un viaje en tren por un motivo que solo él sabe y que puede cambiar su vida para siempre. 

Allí conocerá a la señora Watts, la que será su acompañante de viaje aquella noche. 

Matthew le narrará durante el trayecto la historia de su vida empezando en cuando era pequeño y vivía en un tranquilo barrio de Chicago, sus juegos, sus ilusiones y su primer amor: su vecina Emma y cómo, con el paso de los años, acabó enrolado en el ejército para luchar en esa fatídica guerra. Narrará sus experiencias personales y cómo afrontó, sobreviviendo, una guerra que truncó una hermosa historia de amor. 

Un viaje fascinante por la vida de Matt y Emma en una época tal convulsa como la Segunda Guerra Mundial. 

¿Conseguirá el amor sobrevivir a esta guerra?

Mariah Evans es el seudónimo que usa esta escritora nacida el 7 de enero de 1983, en Barcelona. Es licenciada en Derecho y en la actualidad compagina su trabajo en la abogacía con la literatura. Le encantan los animales, el cine y obviamente los libros. Se confiesa una lectora empedernida desde muy pequeña y esa misma afición ha sido la que le ha llevado a crear sus propias historias, siempre con el objetivo de hacer disfrutar al lector.

No le gusta encasillarse en un mismo género y sus libros mezclan tanto la intriga, como la acción y el romance.

En Tiempos de Guerra es una novela romántica – histórica, cuenta la historia de Matthew Perlman, un joven veterano de la Segunda Guerra mundial, quien regresa a casa una vez, como no, finalizada la guerra en Europa, en el año 1.946.

Lo primero de todo, es que a pesar (y más bien gracias a ello fue como me decidí a leerla finalmente) a su bonita portada, sentí bastante reticencia a adentrarme en la obra, aunque ya había leído algo de la autora, que me impresionó bastante, por su manera de escribir, ya he mencionado anteriormente que al tema de la guerra y en especial la Segunda, suelo rehuirle. Sin embargo, la sinopsis de la historia no dejaba de tentarme, amén de la portada del libro y no sé, ya saben que creo en eso de que son los libros los que te encuentran y no tu a ellos, sentí esa clase de energía con ella.

Ahora bien, a lo que me trae aquí, la reseña.

La historia inicia con Matt abordando un tren, una noche helada en vísperas de las festividades navideñas, para dirigirse a Devil`s Lake en Dakota, dudoso eso sí, de que el motivo o la empresa que lo lleva hasta allá resulte ser del todo infructuosa. Éste accede inmediatamente al que será su camarote, pensando que lo espera una noche solitaria y quisiera pensar que colmada de recuerdos, muchos recuerdos que lo han marcado para siempre. Pero apenas se siente cómodo en su propia piel irrumpe una mujer que él mismo describe como de rostro sonriente y que aparenta unos 65 años, y a mi parecer bastante mandona. Pero nada, una mujer muy agradable y curtida llamada Nicole Watts. Ambos hacen buenas migas inmediatamente y es allí cuando ésta lo conmina a contarle su historia, y debo decir “¡que historia!”.

La misma está contada por dos narradores, cuando nos hayamos en el presente, es Matt, de primera persona quien nos relata los acontecimientos, pero en cuanto nos lleva por su pasado hace su entrada el narrador omnisciente, y éste ha sido un elemento que me ha gustado bastante, porque nos permite ver de manera global los hechos que se van suscitando en su vida.

Esta no es sólo la historia de Matt, lo es también de Emma, capaz de sobrepasar el tiempo y las circunstancias a las que éste par se ven sometidos. Baste decir que es una historia que me ha dejado colmada de muchos sentimientos, toda una montaña rusa de sensaciones.

La misma está marcada en tres estadios, en primer lugar Matt nos lleva a su niñez, su cálida y dulce niñez en la que es feliz y despreocupado junto a sus amigos John y Walter y por supuesto, nunca puede faltar el tonto y abusador, representado por Thomas; pero tampoco nos olvidemos de una dulce e inocente Emma, la vecina de Matt, a quien éste siempre defiende y protege, son el dúo dinámico, por llamarlo de alguna manera.

La siguiente etapa culmina con un baile, muy especial e inicia con la marcha de Matt a la Academia Militar de West Point, a donde éste siempre ha querido asistir para convertirse en piloto, de allí transcurren 5 años en los que poco sabe Matthew de Emma, conoce nuevos amigos como el simpático Tony y su novia Anne, además de Jeff, el típico sujeto solitario, pero con quienes logra forjar una bonita y gran amistad; además de Alice, un personaje que llega a significar bastante para él.

La última estación, o al menos así lo considero yo, ocurre luego del asalto a Pear Harbor por parte de los japoneses y que da lugar a que Estados Unidos decida participar en la guerra, por lo que Matt, ya más cercano a Emma debe marcharse nuevamente para enfrentarse con las potencias del eje. Esta parte marca no sólo el clímax de la historia, es más un sinfín de emociones, del cual no pude despegarme.

Personajes:

Abie y Robert Perlman: Los padres de Matt, un matrimonio que me ha encantado.

Sophia y Nicholas: Los padres de Emma, cuya historia ya conocerán, no diré más.

John y Walter: Amigos de la infancia de Matt y Emma, con los que pasarán momentos divertidos e inolvidables.

Tony, Jeff y Anne, y Alice: A quienes conoce Matt durante su estancia en la academia.

Carl: Compañero de Matt durante su estancia en la base de Chanute, luego de abandonar la academia y quien también lo acompaña a la guerra.

Bruce y Gary: Otro par que se les unirá y con quien entablarán amistad a lo largo de la guerra.

Con qué me quedo?

¿Qué puedo decir? Con todo, sus personajes, la narración, mención debo hacer de toda la documentación que debe haber realizado la escritora, pues como lectora asidua hace bastante tiempo de los hechos de la Segunda Guerra Mundial, diré que ella hizo su tarea, de hecho no había leído nada de las Ardenas y la forma en que ella fue hilvanando todo y lo ajustó a la historia fue fenomenal, al igual que el Día D, con respecto a la situación mundial y en especial de EE.UU, con el tema de la Gran Depresión de finales de los años 20 y su incursión en la guerra, logrando que la historia resultase creíble y se sienta tan real.

En líneas generales, ésta es una historia espléndidamente contada, llena de personajes con los que te vas a encariñar, a emocionar y en definitiva a enamorar perdidamente. Yo lo hice sobre todo de nuestro protagonista, es un hombre en toda la extensión de la palabra, aunque sí, ya sabemos que no es real, pero es un personaje encantador, romántico, pero al mismo tiempo, creo que bastante cuidado por parte de la escritora, porque se siente muy humano y real.

Sin ánimos de exagerar ni sonar demasiado lisonjera, ésta es una de las mejores novelas que he leído en el año y considero que todos deberían disfrutarla, nos deja grandes mensajes que no debemos permitir dejar de lado, como son la importancia de nuestra humanidad, la lucha por la justicia y el bien común y de los horrores que nos dejó la guerra, la esperanza, el amor que es capaz de romper todas la barreras.

Gracias Mariah Evans, por regalarnos ésta tu historia, se nota que hecha con amor, ya que fue dedicada a alguien muy especial en tu vida y que de seguro debe sentirse muy orgulloso por el trabajo que has logrado, gracias por hacerme emocionar, por hacer posible vincularme tanto con la historia de nuestros protagonistas y enamorarme en especial de Matt y del resto de personajes.

Qué me ha disgustado?

A ésta historia, y es mi visión particular, claro está, no le he encontrado ninguna falla, quizás solamente el hecho de que como bien he comentado en previas ocasiones, me habría encantado un epílogo, pero les cuento algo, el final es de película, yo no lo habría esperado, para nada, me sorprendió gratamente y me dejó con deseos de saber más.

Por otro lado, me habría encantado saber un poco más acerca de Emma, quizás como mujer siempre queremos conocer el lado femenino de la historia, pero debo decir que me sorprendió bastante también la forma tan fluida y natural en la que ella nos presenta las ideas y el universo del personaje masculino principal.